Juan Diego Florez - Background Articles, Lima, April 2004

La crítica especializada considera que Juan Diego Flórez va rumbo a convertirse en el primer rey de la ópera latina del siglo XXI. Su extraordinario talento lo ha demostrado en los teatros más prestigiosos del mundo, como la Scala de Milán o el Lincoln Center de Nueva York.

La próxima semana se presentará en Lima por primera vez con una ópera: La Fille du Régiment. Correo entrevistó en exclusiva al joven tenor, quien nos habló sobre cómo asume la fama, lo que añora de Lima y en dónde reside la felicidad para él.

Correo: ¿Cómo estás manejando este buen momento de tu carrera, donde incluso medios tan prestigiosos como The New York Times te alaban? Te lo pregunto porque la fama mal entendida puede ser peligrosa.

Juan Diego Flórez: Bueno, todos los halagos son la confirmación de que uno está haciendo las cosas bien. A veces no todas las funciones de ópera o conciertos salen como uno quisiera, por diversos motivos (cansancio, algún malestar o poco tiempo para preparar una función), y es entonces que no todas las críticas son positivas. Lo esencial es saber por qué esa función no salió bien y tratar de no cometer errores en el futuro.

JDF: Mira, en ese tema lo importante es que cuando uno haga la suma final vea los resultados positivos, y la verdad es que los resultados de estos primeros casi ocho años de carrera los han sido. Yo trato siempre de estar a la altura de todos los compromisos, que son muchos. La fuerza de la juventud me ayuda a afrontarlos y sobre todo la fortuna de tener una buena técnica vocal. También los afectos son importantes, ayudan a tener un buen equilibrio emocional.

JDF: El hecho de que Pavarotti hable bien de mí es un honor increíble. Pavarotti ha tenido quizás la voz más bella del siglo pasado, con una carrera de más de 40 años. Ha escrito páginas inolvidables de la historia del canto. Yo lo admiro desde que comencé a dar mis primeros pasos en el Conservatorio Nacional de Música en Lima, tenía sus discos de arias y los escuchaba siempre. El es mi ídolo, y el hecho de que ahora hable tan bien de mí hace que me sienta muy feliz y honrado.

JDF: No, de ninguna manera me representa un fastidio. Lo que sucede en relación a Puccini y Verdi es que son compositores que no han escrito mucho para mi tipo de voz. Verdi ha escrito sólo Falstaff, I Giorno di Regno y Rigoletto y Puccini, Gianni Schicchi. Mi repertorio se centra en Bellini y Donizetti, y naturalmente Rossini. No sé si Pavarotti habrá dicho exactamente eso, pero él sabe cuál es mi repertorio y el tipo de voz que tengo. Quizás lo que quiso decir es que tendré que afrontar óperas más populares, como Rigoletto, la cual presentaré en un futuro en Lima.

JDF: Bueno, un poco de nervios, pero más que nada inconsciencia. La inconsciencia del debutante y de la juventud. Debuté en la Scala a los 23 años. Sólo tiempo después me he dado cuenta de lo que han significado las primeras presentaciones.

JDF: De Lima extraño todo lo que hacía hasta los 20 años: estar con los amigos, jugar pelota, la comida, las reuniones familiares con guitarra y cajón, la tranquilidad de los domingos, la playa, los desayunos y la música criolla.

El próximo fin de semana todo Lima estará en el Teatro Segura. Lo hará para inaugurar a lo grande la Temporada de Ópera 2004, que cuenta con el auspicio de la Universidad de San Martín de Porres, al alimón con la Municipalidad de Lima Metropolitana.

Como ya se ha hecho público, esa alta casa de estudios acaba de fundar el Instituto de Arte Lírico, que al mismo tiempo será un estupendo semillero para lograr los nuevos valores del bel canto y se constituirá en un importante centro de estudios musicológicos.

Pues bien, el primer Profesor Honorario del flamante instituto será nada más ni nada menos que la revelación peruana de la ópera, Juan Diego Flórez. La ceremonia tendrá lugar ese cercano lunes, en el Instituto de Arte Lírico, de la Av. Javier Prado, a las 11 de la mañana.

Obviamente, Juan Diego no sólo será Profesor Honorario. Ya que también, sabemos, se dará tiempo, cada vez que recale en Lima, para dictar clases y pequeños seminarios. Esto es, confrontar sus experiencias con los alumnos que tratan de enrumbar por la no muy fácil senda del arte lírico.

El tenor peruano, Juan Diego Flórez, informó que está "preparando" un disco de música latinoamericana en donde incluirá cinco canciones peruanas, en su mayoría de la fallecida intérprete criolla Chabuca Granda.

"Son cinco canciones peruanas que arreglo yo mismo para orquesta. Casi todas (las canciones) de Chabuca Granda y una marinera limeña", señaló el reconocido cantante lírico en diálogo exclusivo con RPP-Noticias.

Flórez se encuentra en Lima para protagonizar "La Fille du Régiment" (La Hija del Regimento- obra fundamental de Gaetano Donizetti), en el Teatro Segura, lo que significará su debut absoluto en una ópera en Perú.

"Es la primera vez que me presentó en Lima haciendo una ópera escenificada porque (anteriormente) hemos hecho ópera en forma de concierto. Es una ópera que la quiero mucho por la belleza musical", explicó.

De otro lado, Flórez se mostró sorprendido por el éxito que ha conseguido en el mundo operístico, sin embargo aseguró que aún mantiene los "pies sobre la tierra" porque "todavía hay mucho que aprender".

Juan Diego Flórez ha demostrado que la sencillez en él no es algo impostado, sino que realmente tiene que ver con su manera de ser. El tenor llegó a Lima para presentarse con la ópera La hija del regimiento de Donizetti el 27, 29 y 1 de mayo en el teatro Segura. Correo lo entrevistó y habló de su pasión por la música popular y el deseo de cantar con Gian Marco en un concierto.

Juan Diego Flórez: El realizar este tipo de disco es una tradición; por ejemplo, Plácido Domingo lo ha hecho y en mi caso no te olvides que yo he crecido con la música popular y este trabajo va a nacer de una manera muy natural, porque yo siento amor y placer por este tipo de música, donde habrá temas peruanos como: La flor de la canela, Fina estampa, José Antonio, La jarra de oro, entre otros. También canciones como México querido y lindo y el tango argentino en El día que me quieras.

JDF: Estoy seguro que el público va a quedar maravillado con La hija del regimiento, porque tiene una puesta en escena impresionante, fastuosa, diferente, en otras palabras va a ser todo un espectáculo para la vista. De otro lado, la calidad de la vocalidad es muy importante en esta ópera, sobre todo por las bellas arias que el tenor tiene que cantar.

JDF: Bueno una cosa es hacerse el caprichoso, que esa es una de las actitudes del divo clásico, pero eso ya está pasado de moda. En otros tiempos los artistas tenían que ser divos para llamar la atención, incluso si tenían que caminar sólo dos cuadras se les enviaba una limosina para llevarlos y otro tipo de complacencias, pero ahora ya no existe eso, creo que la gente tiene los pies más en la tierra. Pero sucede el caso de que en algunas ocasiones la gente es injusta, señala que tal artista es divo porque no quiso hablar, pero no toman en consideración de que ese artista estaba agotado y necesitaba descansar, sobre todo si es alguien que viaja continuamente por su carrera.

C: ¿Has tomado en cuenta que tus presentaciones han producido una ebullición del bel canto en Lima, una ciudad donde no existe una tradición de ópera y de seguro mucha gente va a ir por primera vez a ver un espectáculo de ese género?

JDF: Bueno, si esto va a servir para una causa buena, positiva, me va a alegrar mucho. De todas maneras creo que la gente va a descubrir un mundo que los va a llenar, donde van a experimentar música en su más alta expresión.

JDF: Lo que sucede es que el público que tenemos los tenores como referencia es el de la ópera, ellos nos quieren escuchar cantar ópera y no temas populares. Ahora, a las casas discográficas les interesa que uno haga discos con este tipo de música para que vendas más, pero el público que va a llevar a la fama al tenor es el que va al teatro a ver ópera. Y en relación a los tres tenores, la gente que siente pasión por la música popular, como yo, los aprecia.

JDF: Sí, pero eso no significa que ese público sea superior. Es selecto como puede ser el público del jazz, que tampoco es un público masivo. Creo que la ópera es para gente con un tipo de sensibilidad hacia un tipo de música más compleja.

Sin el usual acento italiano y mucho más reposado, Juan Diego Flórez expresó ayer en conferencia de prensa que "fue un gran shock que Pavarotti diga que soy su sucesor". Añadió que considera "un mito" al exitoso tenor y que es y será siempre su "ídolo".

Es "un gran honor", agregó Juan Diego, quien mencionó que la "química fue instantánea" cuando cantó por primera vez en vivo para Pavarotti en el hogar de este. El exitoso tenor de sólo 30 años, manifestó que fue "un momento clave" en su vida artística cuando Luciano Pavarotti lo invitó a cantar en la ceremonia de despedida en la Opera Metropolitana de Nueva York. "Cuando terminé de hacerlo, Pavarotti fue a darme un abrazo, el cual registré en una foto que pondré en un marco para siempre", sostuvo.

Continuando con los lazos amicales, Flórez, quien estará la próxima semana en la ópera La hija del regimiento en el teatro Segura, declaró en torno a su amistad con Gianmarco: "hemos cantado juntos en algunos dúos. Estamos hablando para, en el futuro, hacer algo juntos". Posibilidad que seguramente se concretará ya que afirmó ser "bastante testarudo, como buen capricornio".

Finalmente, Juan Diego indicó que pese a tener una agenda copadísima hasta el 2009, mantiene una relación sensorial con el Perú. "Recuerdo los sabores, la música peruana, la playa, los campamentos que hacíamos de jóvenes, todas esas sensaciones me quedan y siempre las recuerdo. Tengo siempre un tiempo para Lima", concluyó.

Apareció casi de incógnita en la conferencia de prensa de Juan Diego Flórez y terminó robándose la mirada no solo de la prensa, sino también de los invitados que se hicieron presente en el Swissotel. Julia Trappe es el nombre de la simpática australiana de 24 años, que hace un año mantiene una relación sentimental con nuestro famoso tenor, y según nos confesó, ya son novios con planes matrimoniales.

Tiene porte al caminar, y aunque vestía sencillamente, denotaba ser una mujer inmersa en el mundo de la belleza. "Sí, soy modelo. Nací en Australia, pero trabajo en toda Europa", explicó con un español entendible. Con una sonrisa en los labios confesó que su acercamiento con nuestro idioma empezó de la misma manera que su romance.

Quiso expresar más cosas sobre la relación con el tenor y las hizo en inglés, traducida por la hermana de Juan Diego. "Llevamos un año juntos. Lo conocí en Viena, estoy muy enamorada y orgullosa de tenerlo a mi lado".

Es la primera vez que Julia visita nuestro país. Mencionó que conoce de la cultura por los afiches turísticos que apreció en su trajinar como modelo. También sabía de la buena sazón de la cocina peruana y es por ello que apenas concluyó la rueda de prensa, se dirigió junto a su futuro suegro Juan Flórez y algunos familiares más a un restaurante capitalino. ¿Y Juan Diego? Pues minutos después lo siguió en otro vehículo. Amigos muy cercanos aseguran que el tenor no desea mezclar su vida profesional con la personal y por eso evitaron posar juntos en la presentación de la corta temporada que hará en Lima.

Juan Diego Flórez es, sin ninguna duda, el mejor tenor lírico del Mundo. Un tenor lírico es un tenor que -llevado por la particular naturaleza de su voz y demás dotes musicales y personales-se especializa (temporalmente o durante toda su carrera) en ese interesantísimo subgénero de la ópera llamado bel canto.

Bel canto es una forma de composición operática que prevaleció, sobre todo en Italia, en la primera mitad del Siglo XIX. Lo definen tres características principales: 1) una gran belleza melódica; 2) uso abundante de fioriture, vale decir adornos musicales que florecen dentro de sus deleitosas melodías; y 3) pasajes de inmensa exigencia vocal que parecen mandar a los cantantes a misiones suicidas, imposibles heroísmos vocales.

Es en este dificilísimo género que Juan Diego es el mejor. Y de este género vamos a disfrutar durante las próximas dos semanas en las que Lima se convierte en la capital mundial del bel canto (no exagero, ha llegado a Lima un crítico de la revista Opera de Londres a reseñar el evento).

Los principales compositores del bel canto son Donizetti, Bellini y Rossini. Esta semana y la próxima escucharemos La hija del regimiento de Donizetti y Capuletos y Montescos de Bellini. Cantarán no solamente Juan Diego sino sopranos, mezzos, barítonos, tenores dramáticos y bajos también muy famosos. Y el próximo año Juan Diego vendrá a cantar El barbero de Sevilla de Rossini, con lo que se completará esa tríada de famosos compositores.

Uno de los momentos más famosos de todo el bel canto es un aria para tenor ligero de La hija del regimiento de Donizetti (va martes, jueves y sábado) que se llama Ah! mes amis (Ah, mis amigos). Lo que está pasando es lo siguiente: Tonio se ha enrolado en el regimiento francés para poder casarse con Marie. El regimiento ha criado a Marie como a una hija, y es este padre corporativo quien debe consentir el matrimonio. Después de algunas angustiantes idas y vueltas, el regimiento accede y Tonio. pues Tonio expresa la dicha que siente cantando nueve do agudos, cada uno al final de un intervalo de una octava completa. Es que si uno está verdaderamente feliz, nada es imposible. Ni siquiera soltar esa serie de notas que asombran cuando son cantadas medianamente bien pero que, cuando las canta Juan Diego Flórez, parecen un milagro tan natural como fácil.

Es que el heroísmo vocal y la complejidad melódica propias del bel canto no deben hacerse evidentes. Que la música exprese sentimientos y motivaciones es el sentido mismo de la ópera. Y trascender la dificultad de los pasajes imposibles para expresar lo que está pasando con el personaje, eso es lo que Juan Diego logra cotidianamente.

Recién llegado de Bolonia, Italia, en donde hace menos de una semana ofreció una espectacular presentación de la ópera "Le comte Ory", el tenor Juan Diego Flórez ultima ya los detalles para el que será su debut absoluto en una ópera en Lima. En "La hija del regimiento", traída al Perú en su versión original francesa, el joven cantante estará acompañado de grandes estrellas del bel canto como Paolo Bordogna, Lubica Vargicova o la diva italiana Katia Ricciarelli, quien ha confesado tener una profunda admiración por el trabajo de Juan Diego.

Dijiste que lo que más te gusta de "El barbero de Sevilla" es que en ella encuentras una perfecta combinación de elementos histriónicos y vocales. ¿Qué podrías destacar de "La hija del regimiento"?

"La hija del regimiento" me gusta porque es básicamente una obra para tenor. En ella podré demostrar mi talento, sobre todo en esa aria de los nueve DO, que es muy difícil, algo así como "la donna e mobile". Además, es ligera y muy divertida y fácil de escuchar, inclusive para una persona que no es muy asidua a estos espectáculos.

Recuerdo mucho el debut, en el 2001, que hice en Las Palmas de Gran Canaria. El gran tenor Alfredo Kraus nació allí y fue un gran cantante de "La hija.". A mí me comentaron que el público sería difícil de conquistar. Sin embargo, y para alegría mía, recibí una cálida ovación. Mucha gente se puso de pie para aplaudirme.

El público latinoamericano es muy especial. Además de su calidez, suele considerarte como uno de los suyos, como parte de su cultura. Al final de mis conciertos, ejecuto siempre una canción latinoamericana, a manera de regalo. En México, por ejemplo, canté "La flor de la canela", y fue una locura. En Puerto Rico interpreté "En mi viejo San Juan", un bolero que es como un himno para ellos y que caló muy fuerte a sus corazones.

Sin duda es valiosa; no solo porque somos uno de los pocos países en América Latina que puede preciase de tener uno sino, además, porque aquellos que aspiren a ser cantantes de ópera encontrarán aquí una educación integral. Aquí hay muy buenas voces que quizá simplemente necesiten de una buena orientación, y esta es una buena iniciativa para dársela.

Un periodista del New York Times esperaba que tu talento vocal, sumado al 'look' que tienes, no llevara a que un día te cansaras de cantar a Rossini y prefirieras iniciar una carrera como artista pop.

(Risas) No lo creo. A mí me gusta la ópera y disfruto cantándola. En todo caso, como amante de la música peruana, preferiría hacer una carrera con ella. Y de hecho lo hago: el año que viene grabaré un disco de música latinoamericana en el que incluiré cinco canciones peruanas, de Chabuca Granda y algunas marineras. ¿Por qué no preferir la música de mi país si tengo la oportunidad de hacerlo?

Aquellos que no consigan entradas para ninguna de las funciones en las que se presentará "La hija del regimiento" (27, 29 de abril y 1 de mayo) en el Teatro Segura, podrán disfrutarla simultáneamente a través de cinco pantallas que serán instaladas en la Sala Alcedo del Teatro Segura. Esta alberga a un máximo de 300 personas, quienes podrán ver a los artistas en vivo y en directo, pues estos se acercarán para recibir las ovaciones luego de cada acto. El valor de estas entradas será más bajo que las otras, ya agotadas.