Roberto Alagna, un tenor en su tiempo
Eliezer Ríos Camacho, El Vocero, 1 February 2003
Podría resultar escandaloso para los melómanos más conservadores, pero el
tenor Roberto Alagna no duda en afirmar que el cine es la próxima frontera
de la ópera. Al menos si como género artístico quiere llamar la atención y
penetrar en el gusto de las nuevas generaciones moldeadas por el multimedia
y las imágenes de edición vertiginosa. Por eso se le ve tan cómodo como el
"Cavaradossi" de la versión cienematográfica de "Tosca", del director Benoit
Jacquot, exhibida en la Isla en meses recientes.
De igual forma, Alagna ha protagonizado una versión para el cine de la ópera
"Romeo y Julieta", y entre sus planes se encuentra llevar a la pantalla
grande la ópera "l Pagliacci".
"Hay que hacer ópera de una manera moderna y el cine está para eso. El cine
no es ópera, es algo más; es un apoyo", expresó vía telefónica Alagna. Sin
embargo, no por esto se ha alejado de la representación escénica del canto
lírico.
De hecho, Alagna arribó ayer a la Isla para presentarse en concierto el
miércoles 5 de febrero en el Centro de Bellas Artes. Se trata de una
oportunidad única de disfrutar de una de las voces mejor cotizadas de la
escena operística internacional, y que llega a nuestras costas como parte de
la gesta titánica que sostiene Guillermo Martínez, presidente de Culturarte,
en su empeño de incluir a San Juan entre las escalas de las más prestigiosas
voces del mundo. El cantante llega de Francia, donde agotó una agenda de
conciertos y de presentaciones en la televisión nacional. Pero antes,
realizó su debut en Los Angeles de una manera un tanto sorpresiva, el pasado
18 de enero.
A sus 39 años de edad, Alagna, nacido en Clichy-sous-Bois, Francia, y criado
en París de padres sicilianos, puede contar entre sus logros el haber sido
llamado por Plácido Domingo para que se presentara en su lugar en un
importante concierto en Los Angeles Opera. Originalmente sólo participaría
de una parte del programa interpretando arias de Monteverdi, Berio, Massenet
y Verdi, sin embargo ante una repentina indisposición de salud de Domingo
hubo de sustituirle en el mismo programa interpretando dos actos de
"Werther" , de Massenet así como el acto final de "Otello", de Verdi, lo que
sólo puede ser descrito como una hazaña. Domingo entonces pasó a dirigir la
última parte del programa.
"Yo escogí esta profesión porque me gustan los retos. No me gusta hacer lo
mismo todos los días. Fue una gran oportunidad el ser dirigido en Otello por
un gran Otello como Plácido", expresa el tenor, cuya carrera profesional
despuntara a partir de 1988, tras obtener el primer premio de la Competencia
Internacional Luciano Pavarotti en Filadelfia.
Desde ese momento su vida se convirtió en ese sueño que apenas se atrevía a
alimentar de pequeño, cuando oía cantar a su tío -también tenor- o cuando
escuchaba grabaciones de Enrico Caruso en su hogar. Esa niñez en la que
sentía una mezcla de sensaciones por no sentirse ni francés ni siciliano.
"De joven sentía como si no perteneciera a ningún país. En Francia me decían
que era de Italia y viceversa. Me resultaba difícil encontrar una identidad.
Tenía el corazón dividido entre dos culturas. Sin embargo, a lo largo de mi
vida he aprendido a encontrar lo positivo de lo aparentemente negativo, y
veo que esa mezcla de culturas trabajó a mi favor. En mi voz se combina la
energía volcánica del temperamento siciliano y la elegancia del estilo
francés, y eso me hace diferente".
Ahora vive ese sueño día a día y su hogar es una extensión del mismo, puesto
que está casado con la soprano Angela Gheorghiu, con quien ha protagonizado
las óperas que ha llevado al cine y grabado varias compilaciones de arias
muy exitosas. De hecho, Alagna viajará a la Isla junto a su esposa y a su
hija, Ornella, fruto de su matrimonio con Florence Lancien, quien falleciera
en 1994.
"El amor que sentimos se percibe a través de nuestro trabajo. Por eso nos
gusta trabajar juntos todas las veces que se nos sea posible y amoldamos
nuestras agendas para no estar separados por mucho tiempo", expresa el tenor
evidentemente emocionado mientras recuerda el romántico inicio de su
relación.
"La experiencia escénica más importante de mi vida ha sido el momento en que
conocí a Angela en el escenario del Covent Garden. Fue amor a primera vista.
Y el otro momento más importante fue cuando nos casamos en el intermedio de
una presentación en el Met. Mi relación con Angela me ha hecho más fuerte y
mejor artista".
¿Y qué podemos esperar de su debut en Puerto Rico?
"Cuando voy por primera vez a un país, no trato de hacer un programa muy
fácil para triunfar, me gusta el reto de establecer la relación con el
público. Sería fácil hacerlo con piezas fáciles, pero no me gusta eso.
Entonces no sabes si sales bien por ti o por las piezas conocidas. Por eso
voy a combinar arias conocidas con otras de mayor dificultad. Interpretaré
piezas de Leoncavallo, Puccini, Gounod y de autores franceses; me gusta el
eclecticismo", expresa el tenor, quien luego de cantar en la Isla agotará
una temporada en el Metropolitan Opera House con las óperas "Fausto" e "I
Pagliacci".
Retomando el tema del cine, Alagna comenta que se encuentra en la
preproducción de "I Pagliacci", en la que una vez más contará con su esposa
Angela Gheorghiu como pareja y en la que sus hermanos Federico y David
intervienen en la fase de producción, pues se desempeñan como escultores y
escenógrafos.
"Esta producción representa un nuevo reto, pues, a diferencia de Tosca, en
la que el sonido fue grabado en estudio, en esta ocasión estaremos filmando
y grabando el sonido en los lugares originales de la historia. Sólo la
orquesta será grabada previamente. Será un gran reto porque cantaremos cada
toma en vivo. Es una nueva sensación. Es la manera de atraer una nueva
generación hacia la ópera. Disfruto mucho de trabajar con mis hermanos
porque me involucro en todos los aspectos de la producción. En ese momento
soy como un director, lo cual no descarto hacer en un futuro".
Al plantear la diferencia entre la representación teatral, donde se actúa y
se canta una sola vez, en lugar de repetir tomas, Alagna explica que sólo lo
puede definir como "gimnasia para el cerebro. Mantener la emoción toma tras
toma requiere una gran capacidad de concentración".
En cuanto a la fase escénica, Alagna se prepara para encarnar a "Cyrano de
Bergerac" para Radio France, de la cual también se producirá un dvd, así
como el papel estelar de "Cvalleria Rusticana".
El concierto de Roberto Alagna, el 5 de febrero de 2003 en la Sala Antonio
Paoli del Centro de Bellas Artes es a beneficio del Programa de Becas del
Colegio San Ignacio de Loyola. En el mismo Alagna estará acompañado por la
Orquesta Sinfónica de Puerto Rico, bajo la dirección del maestro Eugene Kohn
y el Coro de Gala, dirigido por Acevedo. Para más información puede llamar a
los teléfonos 787-287-7393, 210-9757 y 751-4343 ext. 6206.
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